Cuatro intensos días....

    Echo la vista atrás y recuerdo los últimos cuatro días. Parece que fue hace un año.

    Veo que cuando coincides en un tema con alguien las horas vuelan y ya no te digo si es un grupo de gente. He aprendido en dos días más que en cuatro años yendo en moto. Técnicas de conducción, trucos de viaje, anécdotas, chistes.... todo eso concentrado en dos días de ruta por el Maestrazgo de Teruel y Castellón.

    Imaginaros ir el miércoles tarde noche de Barcelona a Terrassa, aprox. 30km por autopista, por carreteras secundarias donde poder parar, hablar, comentar, y disfrutar de unas bellas panorámicas de la Capital. Seguir por la carretera disfrutando una conducción pausada y acabarlo todo en compañía en el Café Teatre de Terrassa, como en casa.

     A una hora prudencial partir hacia Morella, viendo Montserrat, Manresa en el centro de su planicie, el Penedés con sus viñedos de cava, Montsant y Priorat con sus vides de vino tinto, fuerte, con cuerpo producto de una tierra dura donde las parras deben vivir apartadas unas de otras. Todo ello conectado por una culebra gris con muchas curvas, que marean hasta al más acostumbrado a viajar.

    Que comilona en Mora, Cal Palomo, para enfilar hasta Motorland en Alcañíz y conocer a un joven piloto que espero que dé mucho que hablar Enrique Ferrer, un máquina encima de la moto y un mordaz verbo en su piquito de oro. Suerte con esa pedazo de Ducati!

    Llegamos a Morella justo a tiempo para encontrar de rebote un buen hotel intramuros de su muralla y cenar en sus soportales. Hay que reconocer que mi ansiado Gin tónic nos hubiera hecho daño.... rajados! XD

    Una noche intranquilo, una dosis de realidad me hace pensar en silencio, y me despierto antes que mi amigo despertador para continuar una preciosa ruta por el nacimiento del río Pitarque y el órgano de Montoro hasta Teruel capital.

     Como puede cambiar el paisaje en una provincia. Desde los montes pelados dónde unas aguerridas plantas aguantan medio secas gran parte del año hasta los frondosos valles llenos de chopos que simulan una blanca navidad con sus borretas extendidas a los cuatro vientos, pasando por el pinar mediterraneo y su característica forma de ser pasto de las llamas.

     Un hasta luego en Teruel y carretera y manta para ver el último título de los chicos de Guardiola en Vacarisses.

     Bonita tradición la de Vacarisses de asar una vaca entera en su Fiesta Mayor Pequeña, y el menda ayudando hasta donde se puede. Momentos impagables: ver 17 grupos de Gigantes y sus fantásticos músicos, danzas populares, conciertos, dormirme en el medio de la disco móvil y una vez degustado el manjar cocinado durante la noche y mañana, recoger y hablar en petit comité. Surgen anécdotas, malos momentos,  sorpresas e ilusiones con el último trago compartido para volver a la rutina semanal.

     Las sesiones de gimnasio me han ido de fábula, cansado sí, pero me siento las piernas!. Y el alma.... amigos míos no quepo en mí, reboso alegría de la gente tan grande que hay a mi alrededor!!